

El cáncer bucal u oral es aquel que afecta a los labios o lengua. No obstante, también puede comprometer otras zonas de la boca como el revestimiento de las mejillas, suelo de la boca, encías y paladar. Según la OMS, este tipo de cáncer tenía la mayor incidencia en personas de entre 55 y 60 años. Sin embargo, cada vez más frecuente en jóvenes.
Para prevenirlo y reducir su incidencia, primero es necesario conocer sus factores de riesgo y síntomas. De esta manera se podrá detectar a tiempo.
Factores de riesgo de cáncer bucal
Se cree que el principal causante del cáncer bucal es el consumo de tabaco. Aunado a esto, el consumo de alcohol aumenta las probabilidades de que aparezca un tumor. Sin embargo, no son los únicos causantes:
- Irritación crónica de la zona como consecuencia de dientes ásperos, dentaduras postizas u obturaciones
- Infecciones producidas por el Virus del Papiloma Humano (VPH)
- Consumo de medicamentos inmunodepresores
- Deficiente o incorrecta higiene oral
Síntomas de cáncer bucal
Además de la aparición de tumores denominados carcinomas escamocelulares, también suelen aparecer úlceras o tumores con las siguientes características:
- Apariencia de fisura profunda con borde duro en el tejido
- Color pálido, aunque puede ser oscuro o pigmentado
- Aparece en cualquier área de la boca (lengua, labio, etc.)
- Es indolora, sobre todo al principio. Sin embargo, puede arder o doler cuando está en estado avanzado
Asimismo, pueden aparecer otros síntomas como:
- Problemas para masticar
- Úlceras bucales (aftas)
- Dolor y dificultad para deglutir
- Dificultad al hablar
- Ganglios linfáticos inflamados en la zona del cuello
- Problemas linguales
- Pérdida de peso
Diagnóstico y tratamiento del cáncer bucal
En primera instancia, el médico u odontólogo llevará a cabo un examen físico para buscar indicios externos de cáncer bucal. Posteriormente, de ser necesario, procedería a realizar una biopsia de llaga o úlcera. De igual manera, en algunas ocasiones, puede ordenar la toma de fotografías o tomografías computarizadas para determinar si el cáncer se ha extendido a otras zonas.
Una vez diagnosticado el cáncer bucal, lo más recomendado es la extirpación del tumor (si es lo suficientemente pequeño). Sin embargo, si el cáncer ha avanzado a los ganglios linfáticos o es muy grande, la cirugía ya no es una opción. En ambos casos, usualmente se puede ordenar radioterapia o quimioterapia. Además de estos tratamientos, también puede recomendarse la logopedia o alguna terapia para mejorar el movimiento, masticación, deglución y habla.
Prevención del cáncer bucal
Un diagnóstico temprano aumenta las probabilidades de supervivencia. Por lo tanto, además de conocer los factores de riesgo, se recomienda:
- Evitar el consumo de tabaco
- Moderar o evitar el consumo de alcohol
- Acudir regularmente al dentista
- Mantener una buena higiene bucal